El pasado 13 de febrero el mundo entero fue testigo de uno de los mayores espectáculos jamás vividos: la estelar actuación de Rihanna tras siete años de ausencia en el, ya legendario, descanso de la SuperBowl. Enfundada en un espectacular mono rojo de Loewe, Rihanna hizo vibrar a todo un planeta demostrando cómo su magia sigue intacta, y emocionando al mundo de la moda con el recuerdo a su gran amigo André Leon Talley, fallecido un año atrás. El momento más emotivo de la gala llegó cuando, al son de su famoso éxito “Diamonds” (in the sky), Rihanna nos elevó al cielo luciendo un impresionante maxi abrigo acolchado de Alaïa,…