Irving Penn (16 de junio de 1917-7 de octubre de 2009) fue un fotógrafo estadounidense conocido por sus fotografías de moda, retratos y naturalezas. La carrera de Penn estuvo marcada por su excelente y reconocido trabajo en la prestigiosa revista Vogue y trabajo como publicitario para clientes como Issey Miyake y Clinique. Su obra ha sido expuesta internacionalmente y continúa en el arte de la fotografía.
Sus fotografías sobre moda convirtieron a Irving en un auténtico mito, y a ser considerado como uno de los artistas que contribuyeron a la creación del imaginario colectivo en lo que al siglo XX respecta. Una vez acabados sus estudios medios, Irving decidió estudiar diseño, para lo cual se matriculó en la Escuela de Artes Industriales del Museo de Filadelfia, donde fue alumno del prestigioso fotógrafo ruso Alexey Brodovitch, y en cuyo estudio empieza muy pronto a trabajar durante los fines de semana.
Penn era un hombre intensamente reservado que evitaba los focos y realizaba su trabajo con una dedicación silenciosa e implacable. En una época en la que la fotografía se entendía principalmente como un medio de comunicación, él se acercó a ella con una mirada de artista y amplió el potencial creativo del medio, tanto su trabajo profesional como en el personal.
Viajó por todo el mundo para realizar retratos y trabajos de moda, pero siempre adoptó con entusiasmo las nuevas ideas y la experimentación fotográfica que compaginó con sus trabajos publicitarios, elevando la fotografía de moda a la categoría de arte. Desde su primera exposición en el MoMA en 1948, su obra ha sido expuesta en los mejores museos del mundo.
El trabajo fotográfico de Irving Penn, la Doctora en Comunicación Audiovisual comenta: “Posee un estilo preciso y elegante que demuestra un gran interés por el detalle. La obsesión por el claroscuro hace que obligue a dirigir la mirada de sus fotografías a la zona más brillante y centrarse en ese algo especial“. Tiago de Abreu Pinto, comisario de la Galería en Madrid asegura: “Utilizaba la plata en sus revelados una técnica tradicional que exigía paciencia y mucha habilidad”. De Abreu Pinto resalta que: “Penn crea unas sutiles gradaciones en las tonalidades de las telas como se aprecia en esta fotografía donde muestra un vestido de la firma francesa Vionnet”.
Irving Penn va a ser, para la vista de todos, un fotógrafo de moda. La distancia que existe entre la fotografía comercial y la artística va a quedar reducida gracias a su trabajo y para conseguir conjugar todas sus facetas. De Abreu Pinto comenta: “Todas sus fotografías de alta costura van a conseguir estabilizar nuevos estándares en la fotografía de moda de mediados del siglo XX, eliminando las decoraciones ornamentales y centrándose en la pieza”. El comisario de arte aclara: “consiguiendo así un resultado con imágenes plenas de sobriedad y distinción”.
Una modelo, un vestido, una forma neutra y austera y una iluminación lateral son cualidades naturales que hacen del esquema básico que pen utilizaba para hacer las fotografías de moda. menos es más va a ser el lema que va a aplicar en todas las facetas de su trabajo fotográfico. Su conexión entre la pintura y el diseño industrial le va a aportar una gran perspectiva de la fotografía. La siguiente fotografía muestra una pieza de la firma Chanel. El Doctor en Historia del Arte define a Coco Chanel como “una diseñadora que va a liberar a la mujer de algunos cánones impuestos en la época, fusionando lo femenino y lo masculino en el vestir gracias a la chaqueta de traje“.
¿Qué te ha parecido este artista de la fotografía de moda? ¿Lo conocías? Os animo a que redescubráis al gran Penn en las exposiciones y hemerotecas de al rededor del mundo. – PATRICIA MUÑOZ. Pamplona
